martes, 28 de marzo de 2017

PARPALLÓ

La cueva del Parpalló
La cueva del Parpalló se encuentra situada dentro del Paraje Natural Municipal Parpalló-Borrell, espacio natural protegido de 560 ha. localizado en el término municipal de Gandia, el cual fue declarado por el Consell de la Generalitat Valenciana como Espacio Natural Protegido. Está catalogada como Bien de Interés Cultural y, desde el año 2008, está en proceso de revisión por la UNESCO para ser declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad. Está a unos 400  metros sobre el nivel de la mar en la vertiente sur del Mondúber, macizo montañoso del periodo cretáceo.
Resultado de imagen de cueva parpalló
 En la cueva de Parpalló se ha encontrado el mayor conjunto de arte mueble prehistórico de Europa. Su cronología abarca todo el Paleolítico Superior. Lo componen más de 6.000 plaquetas de piedracaliza con representaciones simbólicas y de animales. Es por tanto uno de los más importantes tesoros arqueológicos de  la Península Ibérica, y la convierte en uno de los yacimientos arqueológicos más importantes del continente. En el Museo de Prehistoria de Valencia y en el Museo Arqueológico de Gandía (MAGa) se encuentran expuestas algunas de las mejores plaquetas de la cueva. También podemos ver algunas reproducciones en el Centro de Interpretación Parpalló-Borrell.
La entrada de la cueva se presenta como una gran grieta de 15 metros de alto por 4 de ancho.Toma su nombre de un ave que solía habitar cerca de la cueva. En castellano se le conoce como avión (Riparia, riparia). Se diferencia del vencejo y de la golondrina porque el avión tiene el cuerpo negro y el vientre blanco, la golondrina tiene también el cuerpo negro y el vientre blanco pero la garganta de color rojizo, y el vencejo es totalmente negro.
 LA VIDA EN LA CUEVA DEL PARPALLÓ
Los habitantes del Paleolítico superior eran Homo sapiens sapiens, intelectual y físicamente similares a nosotros. Eran nómadas y tenían una alta movilidad territorial puesto que sus presas principales también tenían constantes movimientos. Los lugares donde vivían, como el Parpalló, estarían ocupados estacionalmente.
Los habitantes del Parpalló vivían de la caza especializada, de la recolección de plantas y frutos vegetales y, puntualmente, de la pesca pescados o moluscos. Perfeccionaron las técnicas de caza, sobre todo mediante el desarrollo de nuevas armas arrojadizas, como el propulsor y el arco. También se perfeccionó la fabricación de herramientas líticas y de hueso.
Para cazar ciervos y cabras, los vigilaban y seguían. Esto no es nada fácil e implica una buena organización social y una red de vigilancia y control de los hábitos de la fauna.
Los animales abatidos se trasladaban enteros a la cueva, lo que indica que los lugares de caza estarían cerca de la cueva.
No toda la carne era consumida al instante. Se conocían técnicas de conservación natural de los alimentos como el fileteado y posterior ahumado o secado al aire libre. También se consumía la médula ósea fracturando o hirviendo los huesos.
Las presas preferentes eran los ciervos, las cabras salvajes y los conejos. En menor medida caballos y uros. Los conejos y otras presas pequeñas, como las aves, desarrollaron un papel complementario en la alimentación, como también los recursos marinos y fluviales, especialmente al final del periodo de ocupación de la cueva.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario